Más allá de SurFACES - Conozca a Brandon Muñoz: De salvavidas a estratega de la cadena de suministro

Has desempeñado un par de funciones en BASF Coatings. Cuéntanos un poco más sobre lo que te llevó allí y sibre tu carrera hasta ahora.

Mientras estudiaba en la Universidad Estatal de Michigan, obtuve el título de socorrista. A partir de ahí, seguí otros cursos de salvamento y obtuve certificaciones que me llevaron a trabajar como técnico de emergencias médicas (EMT). Me dedicaba a administrar primeros auxilios y a realizar tratamientos para salvar vidas. Era un trabajo rápido e impredecible. Mi capacidad para evaluar analíticamente una situación y mantener la calma en una crisis me ayudó a destacar en la profesión. Más tarde trabajé en universidades de todo el país impartiendo clases de acuariofilia y técnicas de salvamento, y fui médico de equipo en varios equipos deportivos juveniles. Como ávido aficionado a los deportes, esas fueron grandes oportunidades para apoyar a jóvenes atletas en la universidad, el instituto y la escuela de posgrado.

Conocí a mi esposa y estaba listo para aprovechar mi educación y llevar mi carrera en una nueva dirección que proporcionaría crecimiento a largo plazo.  Acababa de terminar un gran proyecto con el Sistema de Gestión de la Cruz Roja. Un módulo similar a la Gestión de Relaciones con los Clientes (CRM) que se está implementando en el negocio de Repintado Automotriz, ya que buscaban un administrador de crecimiento de ventas.

Tuve suerte de conseguir ese puesto en BASF Coatings, donde llevo más de 11 años trabajando. Actualmente formo parte del equipo de gestión de la cadena de suministro de Automotive Coatings Solutions, donde ayudo a gestionar el flujo diario y la distribución de materiales y productos acabados entre nuestros proveedores, operaciones de producción y clientes a nivel mundial.

¿Cuál es el mayor reto al que te enfrentas actualmente en tu trabajo? ¿Cómo lo has superado?

La reciente migración a un nuevo sistema informático. Implantar el sistema, transferir todos los datos y aprender a navegar y actualizar los procedimientos ha sido todo un reto. Afortunadamente, hemos contado con un gran apoyo, ya sea en forma de personal y experiencia u otros recursos.

Lo mejor de todo es que durante la transición he podido interactuar con muchos grupos diferentes dentro de BASF. Aprovechando los distintos puntos de vista y experiencias, nuestros procesos pueden optimizarse para lograr los mejores resultados.

Hablando de compartir experiencias, eres voluntario en el Equipo de Seguridad de Primeros Auxilios de Southfield (FASTeam). Cuál es tu función en el FASTeam?

He participado en el FASTeam desde 2013 en varias funciones. A partir de este año, asumí el papel de colíder. Es algo que encaja bien con mi formación como paramédico e instructor, y disfruto aportando mis capacidades de forma que puedan ayudar a mis compañeros y a la organización.

Está claro que eres muy activo en el trabajo... y también tienes una ajetreada vida familiar. ¿Cómo lo gestionas todo?

En el trabajo, establezco prioridades y objetivos diarios para mantenerme centrado. Como bien dice, a veces tenemos "imprevistos",  y trabajo con mi equipo para superar cualquier interrupción o reto.

Mi mujer y yo somos los orgullosos padres de tres hijos muy activos y de nuestro perro familiar (nuestro cuarto hijo). Nos gusta viajar y llevar a nuestros hijos a sitios nuevos. Estar al aire libre es imprescindible para nosotros. Cuanto más tiempo podamos pasar al aire libre y dejar que nuestros hijos jueguen y exploren, mejor. Una partida de golf con mi mujer o mis amigos también es una buena forma de recargar las pilas.

Y, por supuesto, no puedo dejar de lado mi pasión: el deporte. Como fanático de los deportes de toda la vida (clasificado para la compatición estatal de tenis durante tres años en la escuela secundaria), realmente disfruto del entrenamiento y voluntariado con atletas jóvenes. Tengo la suerte de desempeñar un papel activo en las actividades de mis hijos y con sus equipos deportivos. Entrenar puede ser muy estresante para algunos, pero para mí es muy terapéutico. Ayudar a mis hijos con sus deportes, ayudarles a aprender y verles crecer es muy satisfactorio.

Mi hijo de casi 11 años practica casi todos los deportes: lacrosse, béisbol, baloncesto, fútbol, golf y atletismo. Y mis gemelos de casi cinco años quieren hacer todo lo que hace su hermano mayor, así que ya participan en todos los deportes de iniciación. Ni que decir tiene que, entre los tres, el deporte estará presente en nuestra familia en un futuro próximo.

Para mí, los malabarismos diarios con el trabajo y la familia son gratificantes. No me imagino haciendo otra cosa.